Cuando salíamos del puerto a casa parecía que entraba una brisa que tenía pinta de poder echar a andar las flotas de 420 y Óptimist.
Con una brisita inicial de unos 4 nudos de levante, aprovechamos la jornada para ponernos al día dando caña a Pablo en la proa ya que hacía 6 meses que no cataba platú.
No hay comentarios:
Publicar un comentario